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Creatividad Sin Fronteras
Edición #13
Las vacas tienen mejores amigas… y se estresan cuando las separan. La diferencia con los humanos: ellas no fingen para Instagram.
📩 En el correo de hoy
Exploración Profunda: Vivir en grande” fue solo el calentamiento. Ahora vamos por lo que importa: Creatividad Sin Fronteras.
La Lectura: Greenlights de Matthew McConaughey. Consejos atrevidos de otro nómada tejano—nuestro Santo Patrón del Caos y la Reinvención.
Te Presentamos: La Mordida – Nueva sección rotativa. Esta semana: Jungle Brew en la Minorista. Una bebida misteriosa, energía selvática y riesgo creativo.

“Creativid Sin Fronteras”
📢 Las noticias de las noticias
Ya está en línea: Visita www.atexasnomad.com y explora la nueva casa digital de A Texas Nomad. Ahí está el archivo completo—todo el viaje hasta ahora.
Problemas de correo, resueltos: Algunos mensajes no llegaron la semana pasada—mil disculpas. Ya está solucionado. Puedes escribirnos cuando quieras a [email protected]
Y una disculpa: A veces, como hoy, el libro recomendado no está en español Así que les toca leer esta vuelta nomás.
🥽 La exploración profunda
La banda estadounidense The Flaming Lips lo gritan, no lo susurran:
“¿Te das cuenta de que todas las personas que conoces algún día van a morir?”
Yo los escuché decirlo en vivo una vez.
En L.A. estábamos con mi hermano en un concierto sorpresa en el Teatro Montalbán, justo frente a nuestra oficina en Hollywood. No íbamos a estar ahí. Solo aparecimos en el lugar correcto, a la hora exacta.
Wayne Coyne, el cantante—siempre con algo que decir—pausó entre canciones y soltó esto:
“Esa canción no es nuestra. La encontramos. Ya estaba hecha.”
¡¿Qué?!
(O sea, seguro su abogado se tiró de una ventana en ese momento. 🤦)
Pero entendí lo que quiso decir.
Hay cosas que no escribes. Te llegan.
Como si el universo te dijera: “Esto no lo inventaste… lo recordaste.”
Y cuando te llega algo así—una canción, una historia, una segunda oportunidad—tu deber es vivirla. En voz alta.
¿Y tú? ¿Cómo quieres vivir?
Porque si todos vamos a morir, solo queda una pregunta real:
¿Cómo vas a vivir tú?
Sé valiente. Elige tu batalla. Pero antes, hazte la pregunta: ¿Cuál vale realmente la pena?
Hace unos meses, me lancé unos retos. Nada de “comer rezar amar”. Algo más filoso. Diario:
— Levantarme temprano a escribir
— Ducha fría, aunque Medellín me pida lo contrario
— Meditar dos veces al día, sin excusas
— Grabar vlogs en la calle, con cara de loco
— Cero pantallas antes de dormir
— Decir lo que pienso, incluso cuando una voz adentro diga: “Mejor no”
Esa voz es el portero de la mente. El que te pregunta si estás en la lista.
Ignóralo.
Como dijo Howard Stern, el locutor gringo que construyó su carrera diciendo lo que todos le decían que no dijera… que su carrera cambió cuando dejó de callarse.
Ahí fue cuando la gente empezó a escucharlo.
También fue cuando lo despidieron y empezó a llegar el hate.
Pero ese es el precio de ser visible.
Si vas a liderar tu karass—la tribu que vibra contigo—
prepárate para ser malinterpretado.
Sí, va a volar huevo.
Pero hey… la yema es buena para el pelo.
Y uno tiene que brillar en cámara, ¿no?
Vivir en grande fue solo el comienzo
Durante 12 ediciones, este newsletter habló de Vivir con valentía.
Y funcionó.
Pero había algo más allá.
No era solo hablar fuerte.
Era no tener fronteras.
No solo más volumen.
Más ancho. Más mundo. Más alma.
Así que le puse nombre y dirección:
Bienvenido a:
Creatividad Sin Fronteras
No es un rebranding. Es una brújula.
Significa que:
— No necesitas permiso para empezar de nuevo
— Tu mente es tu pasaporte más poderoso
— Viajar no es huir, es evolucionar
— Crear no es solo hacer cosas, es diseñar tu vida
Y donde estemos, dejamos huella.
Donde caigamos, hacemos algo con eso.
🧬 Esto no se trata de caos.
Se trata de resistencia intencional.
De hacer justo eso que normalmente evitas.
Introvertido: inicia la conversación.
Extrovertido: salta la fiesta.
Creador: publica lo que no está “listo”.
Porque lo que realmente importa no es la plata ni el estatus—
Es tu neuroplasticidad.
El Marco de Creatividad Sin Fronteras
Rompe la comodidad – Haz lo que tu mente evita
Inyecta novedad – Nuevas experiencias = nuevo cerebro
Crea en público – Comparte el proceso, no solo el producto final
Así reconstruí todo.
Y apenas estoy empezando.
⚔️ Desafío de la semana:
Haz lo que tu cerebro dice “hoy no”.
Ducha fría. Publica lo imperfecto. Di la verdad.
Reserva ese vuelo. Llama. Rompe el patrón.
Una micro-rebeldía al día. Esa es la movida.
Y si alguna vez se te olvida por qué todo esto importa…
te dejo con esos filósofos psicodélicos de Oklahoma:
“¿Te das cuenta de que todas las personas que conoces algún día van a morir?”
Entonces, haz que valga.
🤓 La lectura

Seamos honestos—cuando una estrella de cine publica sus memorias, uno piensa… bueno, tal vez necesita pagar la finca.
Pero Greenlights no es eso.
McConaughey se metió de lleno en este libro. Pasó años con él—escribiendo diarios, grabando audios, recolectando recortes de décadas de vivir en voz alta.
Y luego narró el audiolibro él mismo, lo cual significa que existe una versión donde McConaughey escucha a McConaughey para poder re-McConaugheyar al McConaughey que McConaugheyó, asumo, a través del radio CB de una van estacionada en las afueras de desierto de Marfa, Texas.
Sí. Esa frase está bien escrita.
Es Being Matthew McConaughey, versión sin filtro.
Las historias a veces son divertidas, a veces raras—como ese año caótico de intercambio escolar en Australia, o cuando rechazó 14 millones de dólares por un papel para salirse de la cárcel del rom-com.
Eso lo llevó al Oscar por Dallas Buyers Club, y a lo que él mismo bautizó—sí, claro que le creemos—como la “McConaissance.”
Exacto.
Pero lo bueno es que no te entrega una versión editada de sí mismo.
Aquí te muestra los bordes filosos: las malas decisiones, la obsesión con escribirlo todo, la idea de que la vida te lanza “luces verdes”—esos momentos donde el camino se abre y hay que lanzarse.
Y si quieres un ejemplo de texano que vive en grande, no busques más.
McConaughey pasó de Uvalde a la fama mundial.
Un día se fue a tomar algo con un tipo conectado al mundo del cine. En esa misma salida, lo invitaron a audicionar para una peli indie con un tal Richard Linklater.
¿La película? Dazed and Confused.
McConaughey se ganó el papel, obvio. Se presentó en el set con su atuendo, obvio. Le pidieron improvisar una línea, y lo que dijo se convirtió en una de las frases más icónicas del cine.
Obvio.
Piensa en eso otra vez. Abrió la boca, improvisó, y las primeras palabras que dijo en su carrera fueron tan famosas que terminaron tatuadas en muslos.
En la parte interna.
No dos “alrights.” Tampoco cuatro.
La cantidad exacta.
La santísima trinidad del “alright.”
Y si dices que no lo estás repitiendo en tu cabeza ahora mismo, estás mintiendo.
Y si dices que no lo vas a repetir en unas horas… también estás mintiendo.
Yo tuve la suerte de trabajar con Linklater años después (I Dream Too Much, de Katie Cokinos—échale un ojo), así que puedo confirmar que esta historia es real.
Bueno… salvo lo de los muslos. Pero, ¿quién lo duda?
A veces, leyendo el libro, sientes que para McConaughey, un tatuaje en un muslo vale más que el Oscar.
Pero bueno. Ese no es el punto.
Lo que hay aquí es algo con los pies en la tierra.
McConaughey reconoce dónde tuvo suerte, pero también señala los momentos donde creó su propia inercia diciendo no a los caminos fáciles.
No está tratando de ser tu gurú.
Solo te cuenta lo que le funcionó, lo que no, y cómo terminó todo eso. Y eso… eso vale.
Se lee tal como esperarías que lo contara él: sin freno, con todo el acento, riendo, actuando, soltando el dado y viendo qué sale.
Pero no es solo performance. Es un tipo apareciendo tal como es.
Y eso tiene belleza.
Dato extra: McConaughey también vivió como nómada en ciertos momentos, para resetearse, aclararse, volver al centro.
Como yo ahora mismo, desde Sudamérica.
Y, si las señales son correctas, como Futuro-Yo en África también.
Hay una línea invisible ahí. Instinto de caminante.
Él lo siguió. Greenlights es lo que trajo de vuelta.
¿Escéptico? Normal.
Yo también lo fui.
Y me duele un poco admitirlo… pero este libro es honesto.
Auténtico.
Y tan fiel a su marca personal que no puedes más que rendirte.
Es tan difícil soltarlo como empezarlo.
🍋 La Mordida —Jungle Brew (Elixir de la Selva)🗿

Seamos honestos—la mayoría de los mocktails apestan.
Son smoothies con traje de gala.
A mí me gustan las bebidas con colmillos. No las que susurran dulzuras, sino las que te despiertan de una cachetada—amargas, ácidas, fermentadas, llenas de carácter.
Así que, de vez en cuando, cuando aparece una fruta extraña y el día pide algo más que agua, The Squeeze se manifiesta.
No todas las semanas.
No con horario.
Solo cuando los sabores correctos llegan en el momento exacto.
La idea me pegó entre la señora del borojó y el puesto de chontaduro.
La Plaza Minorista es más bien una botica de callejón—llena de ingredientes para pociones que no encuentras en Amazon, sino en el Amazonas.
Y ahí nació la Jungle Brew.
📍Plaza Minorista, Medellín, Colombia
No, no es fácil encontrar todos los ingredientes.
Pero no se supone que sea fácil.
Oscura, terrosa, y susurrada en juguerías desde Quibdó hasta Laureles.
Cuidado—esta es la Poción del Amor #10.

Plaza Minorista
Jungle Brew 🗿
El brebaje afrodisiaco de Colombia: borojó, chontaduro y guanábana mezclados en un cóctel cremoso de selva que, según los locales, sube la energía, mejora el ánimo y, hombres, su… “magnetismo.”
Ingredientes:
½ taza de pulpa de borojó
1 chontaduro, pelado y sin semilla
½ taza de pulpa de guanábana
1 taza de leche de almendras o avena
1 cucharada de panela cruda o miel
Una pizca de canela
Cubos de hielo
½ cucharadita de maca o ashwagandha
Instrucciones:
Agrega todo a la licuadora.
Licúa hasta que quede suave y cremoso.
Sirve frío en vaso alto.
Decora con canela en rama o una rodaja de guanábana (opcional).
Sugerencia para “vitaminar” la mezcla:
(Los tragos de ATN están diseñados para destacar—con capas, carácter, y sin necesidad de alcohol. Pero si prefieres subirle el nivel… sugerimos:)
Ron Viejo de Caldas – 15 Años —Ron colombiano con alma de montaña. Añejado en las alturas de Manizales, con notas de roble, vainilla y fruta seca. No viene a endulzar—viene a profundizar. Su carácter terroso y maduro eleva los sabores del Brujo Borojó, creando una mezcla que sabe a selva densa con traje de lino.
Tú sabes cuánto necesitas.
Yo no soy tu padrino.
Viajar no siempre es bonito. No siempre es cómodo. A veces duele, incluso puede romperte el corazón. Pero está bien. El viaje te cambia—y debería cambiarte. Deja marcas en tu memoria, en tu conciencia, en tu corazón y en tu cuerpo. Te llevas algo contigo. Con suerte, dejas algo bueno atrás.
🛤 Outro
La reinvención no se trata solo de a dónde vas—
sino de cómo creas.
Cada lugar donde aterrizas es una página en blanco.
Lo que escribes ahí… esa es tu huella.
Si este newsletter te encendió algo, compártelo.
Con un amigo, una exploradora, alguien que esté reescribiendo su vida.
Esta comunidad crece con conexión real—
una historia, una recomendación a la vez.
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Nos vemos la próxima semana.
Sigue en movimiento.
Sigue creando.¿Te gustó esto? Compártelo!

Edward McWilliams
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